Seguidores

12 mar 2011

Cuando pierdes algo que aprecias y que amas y por lo que darías tu vida por ello sientes, vacío el pecho, y llenos los ojos de lagrimas, te preguntas por que a pasado o quién a sido el culpable, pero en el fondo sabes que no lo hay. Sientes el recuerdo de lo querido como algo lejano, que te hunde y sabes que nunca vas a recuperar. También pasaras por una etapa en la que negarás lo sucedido, y querrás volver al pasado para intentar evitarlo, pero al fin y al cabo todo es mental, en el mundo real no existen esos tipos de milagros a no ser que seas santo o santa, y con lo único que te vas a quedar de tu ser querido al fin y al cabo van a ser cuatro fotos y los recuerdos de los mejores momentos que habéis tenido juntos.

Adiós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario